Resumen 

El narrador de El gran Gatsby es un joven de Minnesota llamado Nick Carraway, quien no solo se presenta como narrador de la historia, sino que además se proclama autor del libro. Empieza hablando de sí mismo, diciendo que aprendió de su padre a no juzgar a los demás a riesgo de malinterpretarlos al evaluarlos según sus propias normas morales. Se describe a sí mismo como una persona de muy alta moral y muy tolerante. Hace una breve mención al héroe de su historia, Gatsby, diciendo que él representó todo lo que desprecia, pero que lo exime de todos sus habituales juicios. La personalidad de Gatsby fue nada menos que “grandiosa”. 

En el verano de 1922, escribe Nick, acababa de llegar a Nueva York, adonde se había mudado por cuestiones de trabajo en el mercado de bonos, y alquiló una casa en una zona de Long Island llamada West Egg. A diferencia de la conservadora y aristocrática East Egg, West Egg es el hogar de los “nuevos ricos”, aquellos que han hecho fortuna recientemente y carecen de las conexiones sociales y del refinamiento para moverse en el círculo de los de East Egg. West Egg se caracteriza por la ostentación de riqueza y de mal gusto. La casa de Nick, relativamente modesta, es contigua a la mansión de Gatsby, una monstruosidad gótica en expansión. 

A diferencia de sus vecinos de West Egg, que carecen de contactos y de sangre aristocrática, Nick se graduó en Yale y tiene muchas conexiones en East Egg. Una noche, conduce hasta East Egg para cenar con su prima Daisy y su esposo, Tom Buchanan, exmiembro del club social de Yale al que también pertenecía Nick. Tom, una figura poderosa vestida en ropa de montar, lo recibe en el porche, mientras que Daisy descansa adentro en un sofá junto a su amiga Jordan Baker, una competitiva golfista que bosteza como si le aburriera la situación.  

Tom intenta despertar el interés de los demás en un libro llamado El ascenso de los imperios de color escrito por un hombre llamado Goddard. El libro propugna actitudes racistas de supremacía blanca que a Tom le resultan convincentes. Daisy se burla de él por el libro, pero se ve interrumpida cuando Tom debe salir de la sala para atender una llamada. Daisy lo sigue de prisa y Jordan le dice a Nick que la llamada es de la amante que Tom tiene en Nueva York. 

Después de una cena incómoda, la fiesta llega a su fin. Jordan quiere irse a dormir porque al día siguiente tiene un torneo de golf. Cuando Nick está por irse, Tom y Daisy le insinúan que les gustaría que tuviera una relación romántica con Jordan. 

De regreso a su casa, Nick ve a Gatsby por primera vez, un joven apuesto que está de pie en el jardín delantero y tiene las manos extendidas hacia el agua oscura. Nick mira hacia el agua, pero todo lo que alcanza a ver es una lejana luz verde que podría marcar el final de un muelle. 

Espero que sea una tonta, que es a todo lo que puede aspirar una joven en este mundo, a ser una hermosa jovencita tonta. 

Análisis 

En El gran Gatsby son fundamentales las percepciones y actitudes de Nick Carraway hacia los acontecimientos y personajes de la novela. El hecho de que sea Nick quien escribe el libro es su intento de comprender el significado de una historia en la cual estuvo involucrado. Las primeras páginas del Capítulo 1 establecen algunas contradicciones en su punto de vista. Si bien se describe como tolerante y libre de prejuicios, también se considera un privilegiado moral, con un sentido de la “decencia” superior al de la mayoría. Si bien la reacción de Nick a sus experiencias en Nueva York es profundamente negativa, y eventualmente regresará al Medio Oeste en busca de un entorno de menor ambigüedad moral, incluso durante su fase inicial de disgusto, Gatsby se destaca como una excepción. Nick siente gran admiración por él, a pesar del hecho de que representa todo lo que desprecia de Nueva York. Es evidente que Gatsby desafía su forma habitual de ver el mundo y el conflicto que le genera aceptar ese desafío influye en todo lo que ocurre en la novela. 

En el mundo de East Egg, las atractivas apariencias sirven para encubrir realidades menos agradables. El matrimonio de Tom y Daisy Buchanan, superficialmente encantador, parece amenazado por una silenciosa desesperación. A diferencia de Nick, Tom es arrogante y deshonesto, defiende argumentos racistas durante la cena y mantiene aventuras amorosas relativamente públicas. Daisy, por su parte, se esfuerza por ser superficial y hasta llega a decir que espera que su hija resulte ser una tonta, porque las mujeres viven mejor siendo unas tontas de cara bonita. Jordan Baker acentúa la sensación de cansada sofisticación que se cierne sobre East Egg: su cinismo, aburrimiento y deshonestidad entran en total contradicción con su riqueza y belleza. Tal como en el matrimonio de los Buchanan, el glamur superficial de Jordan oculta un vacío interior. 

Gatsby contrasta en relación con los residentes de East Egg. Aunque Nick todavía no conoce el origen de esa luz verde, ni lo que representa para Gatsby, ese anhelo interior que percibe en su postura y su entrega emocional a esta hacen que parezca casi lo opuesto a la sarcástica Ivy League en casa de los Buchanan. Para Nick, Gatsby es una figura misteriosa, ya que desconoce sus motivos, la fuente de su riqueza y su historia, además de que el objeto de su anhelo permanece tan remoto y nebuloso como la luz verde hacia la que tiende las manos.  

La relación entre el espacio geográfico y los valores sociales es otro motivo importante en El gran Gatsby. Cada escenario de la novela se corresponde con un tópico particular o con un tipo de personaje. El primer capítulo presenta dos de los escenarios más importantes: East Egg y West Egg. Aunque cada uno de ellos alberga una riqueza fastuosa y solo están separados por una pequeña extensión de agua, las dos regiones son prácticamente opuestas en cuanto a los valores que ostentan. East Egg representa la buena cuna, la aristocracia y el ocio, mientras que West Egg representa la ostentación, la extravagancia y los modales ampulosos de los nuevos ricos. East Egg queda asociado a los Buchanan y a la monotonía de su posición social heredada, mientras que West Egg queda asociado a la lujosa mansión de Gatsby y al motor interior que está detrás de la fortuna que se ganó con sus propias manos. La imposible intersección entre los dos vecindarios, que surge del romance entre Gatsby y Daisy, actuará como línea de falla de la catástrofe.